La investigación publicada en Scientific American da cuenta sobre ese primer intento de establecer cuántos árboles podría soportar la Tierra, dónde plantarlos y cuánto carbono podrían absorber.
Foto: Pixabay
Si las especies correctas de árboles se siembran en los tipos de suelo correctos en todo el planeta, los bosques emergentes podrían capturar 205 gigatoneladas de dióxido de carbono en los próximos 40 a 100 años, lo que equivale a dos tercios de todos los CO2 que los humanos han generado desde la revolución industrial.
"La restauración de bosques es, con mucho, nuestra solución planetaria más poderosa en la actualidad", dice Tom Crowther, profesor de ecología global de ecosistemas en el Instituto Federal de Tecnología de Suiza en Zurich, y autor de un estudio publicado en Science.
El equipo del estudio analizó casi 80,000 mediciones de fotografías satelitales de la cubierta arbórea en todo el mundo y las combinó con enormes bases de datos globales sobre las condiciones del suelo y del clima, evaluando una hectárea por vez.
El ejercicio generó un mapa detallado de la cantidad de árboles que la Tierra podría soportar de manera natural: dónde crecen los bosques ahora y dónde podrían crecer, fuera de áreas como desiertos y sabanas que albergan muy pocos árboles o ninguno.
El equipo luego restó los bosques existentes y también las áreas urbanas y las tierras utilizadas para la agricultura. Eso dejó 0.9 mil millones de hectáreas que podrían ser forestadas pero no han sido. Si esos espacios estuvieran llenos de árboles que ya florecen cerca, el nuevo crecimiento podría almacenar 205 gigatoneladas de carbono para cuando los bosques maduren.
Según dicen los investigadores, no desconocen que después de 40 a 100 años, la tasa de almacenamiento se aplanará a medida que disminuya el crecimiento del bosque, pero señalan que las 205 gigatoneladas se mantendrían a medida que los árboles viejos mueran y los nuevos crezcan. Habría "un banco de exceso de carbono que ya no está en la atmósfera", dice Crowther.
En la siguiente página web, creada por el equipo, se podrá apreciar el mapa donde cada persona puede acercarse a cualquier ubicación y ver dónde se pueden comenzar nuevos bosques: https://www.crowtherlab.com/
De acuerdo con Crowther, al mundo podría costarle $ 300 mil millones plantar los 0.9 mil millones de hectáreas, pero señala que sería más favorable que las otras alternativas estudiadas como la fertilización oceánica (cultivo de algas para absorber carbono) o la captura de aire directa (máquinas que extraen CO2) de la atmósfera.
Algunos expertos que no participaron del estudio, sin embargo, se mostraron escépticos ante los hallazgos.
“Los bosques pueden necesitar más de 70 a 100 años para alcanzar la plena madurez”, dice Robin Chazdon, ecologista y biólogo evolutivo de la Universidad de Connecticut, Sin embargo, señala que cualquier replantación debería comenzar lo antes posible porque el cambio climático podría comprometer la capacidad de los bosques para crecer. Las temperaturas más altas aumentan la respiración del árbol, lo que les causa estrés. Y la sequía se ampliará, reduciendo el crecimiento de los árboles.
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