Coralina alista una norma cuyo objetivo es promover la conservación de los arrecifes coralinos, desestimulando la captura, caza o pesca de diferentes especies de peces herbívoros.

Foto: Coralina

La resolución que saldrá en próximos días y que recoge hasta el día de hoy observaciones de la ciudadanía, busca mitigar la explotación inadecuada sobre los peces herbívoros, particularmente sobre los peces loro y cirujanos, tendientes a brindar equilibrio entre algas y corales, característico de los arrecifes de coral sanos. Así mismo, garantizar que los peces loros continúen brindado un importante servicio ecosistémico en su rol de fabricantes de arena para las playas a través de su defecación.

De acuerdo con la resolución publicada en la página web de la corporación autónoma, la medida se adoptará luego de estudios y seguimiento a la pesca, en donde de acuerdo al Libro Rojo de Peces Marinos de Colombia (2017) y con datos de la Armada Nacional de Colombia y la Secretaría de Agricultura y Pesca del departamento Archipiélago, se han detenido embarcaciones extranjeras pescando ilegalmente en aguas colombianas, con decomisos aproximados de 9.6 toneladas de peces loro de diferentes especies, observando a suu vez de manera simultánea un incremento en la venta de carne de peces loros, tanto adultos como juveniles en los restaurantes, los cuales provendrían de capturas legales e ilegales en todo el archipiélago.

Señala Coralina que estudios científicos argumentan que los peces loro son sumamente importantes en los procesos de protección de algunos ecosistemas estratégicos como los arrecifes coralinos, las playas, y los servicios ecosistémicos que estos nos brindan, especialmente la protección costera al favorecer el crecimiento de los corales y las barreras coralinas, y la generación de arenas calcáreas para las playas.

A su vez, los peces loro son importantes también para el proceso de bioerosión, que consiste en el desgaste de esqueletos coralinos y en la limpieza de las áreas necesarias para el reclutamiento, crecimiento y sobrevivencia de corales y algas coralinas. Un proceso importante relacionado con la bioerosión, es la excreción de arena blanca, algo que los peces loro hacen luego de morder y comer pedazos de roca arrecifal mientras se alimentan de las macroalgas y microalgas que lo cubren.

Científicos estiman que el 70% de las playas blancas del Caribe y de Hawái han sido formadas con la arena expulsada por los peces loro. Se estima que allí un pez adulto puede llegar a excretar entre 40kg y 200kg de arena por año.

La presencia de peces herbívoros evita también lo que se conoce como ‘cambio de fase’, que se refiere al reemplazo de coral vivo en los arrecifes por macroalgas.

De acuerdo con Coralina, los arrecifes de coral proveen beneficios a la pesca, el desarrollo del turismo, recursos farmacéuticos, y la protección de los impactos del cambio climático.

Así mismo, la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de los Estados Unidos (NOAA por sus siglas en inglés) y la Unión Internacional por la Conservación de la Naturaleza (UICN), estiman la contribución global anual de los arrecifes a la industria pesquera en miles de millones de dólares americanos.

La Iniciativa Internacional para los Arrecifes Coralinos (ICRI por sus siglas en inglés), una asociación global de gobiernos, organizaciones internacionales y organizaciones de la sociedad civil calculan que el valor económico total de los arrecifes de coral sería de más de 20 billones de dólares al año, otras organizaciones, como el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), afirman que los arrecifes de coral tienen un valor estimado entre US$100,000 y US$600,000 por km².

La resolución regirá en el área de jurisdicción de la Corproación para el Desarrollo Sostenible del Archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina – CORALINA y el incumplimiento de las disposiciones establecidas dará lugar a la imposición de sanciones y entrará en vigencia a los tres meses contados a partir de su publicación en el Diario Oficial.