Las rocas cayeron a tan solo seis metros de donde se ubica el puesto de vigilancia que habían destinado los habitantes del corregimiento de Guaduero para estar atentos a la falla geológica.
Foto: Brayan Camargo Herrera
Tremendo susto se llevaron los campesinos que estaban de turno realizando su jornada de vigilancia preventiva cuando sintieron que la tierra empezó a moverse con enormes piedras que caían y golpean con gran fuerza el terreno donde se encontraban, lo que hizo que estos labriegos evacuaran inmediatamente la zona.
Lo preocupante de este nuevo movimiento de tierra es que se originó exactamente al otro lado de donde se abrió la tierra, en jurisdicción del municipio de Caparrapí, lo que enciende las alarmas entre quienes habitan aguas debajo del cañón del Río Negro.
La situación es tan compleja que se espera en los próximos días la visita de geólogos con equipos especializados para hacer estudios a la tierra, ya que también informaron los campesinos que las grietas de la tierra del lado de Guaduas se están haciendo más profundas.
Foto: Brayan Camargo Herrera
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En la zona se han presentado en las últimas horas fuertes lluvias lo que agrava la situación de riesgo.
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