La investigadora de la universidad de Georgia Jenna Jambeck analizó junto con su equipo la cantidad de plástico arrojado en los océanos y de qué países provenía.

Según los autores del estudio, esta fue la primera vez en la historia en la que se consiguió fijar una cifra aproximada al volumen de estos vertimientos. Sus resultados señalaron a China como el Estado responsable de arrojar más productos de plástico en los océanos, con un total de 8,8 millones de toneladas métricas. A este le siguió Indonesia, con 3,3 millones, y Filipinas, con 1,9 millones.

La literatura científica reportó por primera vez la contaminación plástica en el océano en la década de 1970. Según el análisis del informe, más de 40 años después, no existen estimaciones rigurosas de la cantidad y el origen de los desechos plásticos que ingresaron al medio marino. El estudio publicado en Science y realizado por un grupo de trabajo de NCEAS, proporciona la primera estimación que cuantifica la entrada de desechos plásticos de la tierra al océano. Además, el estudio ofrece un marco para desarrollar soluciones a escala oceánica para el problema de la contaminación plástica en ambientes marinos.

Asimismo, el Grupo de Trabajo, Desechos marinos, estimó por primera vez la cantidad de desechos plásticos mal gestionados que potencialmente pueden ingresar al océano anualmente producto de las poblaciones que viven dentro de los 50 km de una costa en todo el mundo. Jambeck et al, descubrieron que solo en 2010 más de 4.8 millones de toneladas métricas de desechos plásticos ingresaron a los océanos desde la tierra, y esa cifra podría llegar a ser tan alta como 12.7 millones de toneladas métricas.

Eso es de uno a tres órdenes de magnitud mayor que la masa informada de plástico que flota en los océanos. Si no se realizan mejoras en la infraestructura de gestión de desechos, se pronostica que los desechos plásticos que ingresan al medio marino aumentarán en un orden de magnitud para 2025, señalan los autores.

De la misma manera, el estudio indica que debido al aumento de la población y al aumento del consumo per cápita, los desechos continuarán creciendo. Mejorar la infraestructura de gestión de residuos en los países en desarrollo es esencial. Posteriormente, mientras se desarrollan estas mejoras, es imperativo que los países industrializados tomen medidas inmediatas al reducir el desperdicio y restringir los plásticos de un solo uso.