Un estudio de la revista Nature revela que investigadores han logrado diseñar plantas genéticamente modificadas capaces de emitir luz de manera continua.
/Nature/
Los investigadores pueden diseñar plantas de modo que cuando se active un gen de interés particular, en este caso el gen de la luciferasa que puede hacer que la planta se ilumine. Keith Wood, director ejecutivo y cofundador de Light Bio, ha estado trabajando en plantas bioluminiscentes desde 1980 para aprender los conceptos básicos de la expresión genética.
Esta petunia luciérnaga brilla intensamente y no necesita ningún tipo de alimento especial gracias a un grupo de genes provenientes de un hongo bioluminiscente (Neonothopanus nambi). Este hongo alimenta su reacción de luz con una molécula de ácido cafeico que también producen las plantas terrestres. Los investigadores hicieron posible que la planta produjera enzimas que pueden convertir el ácido cafeico en la molécula de luciferina y luego reciclarla nuevamente en ácido cafeico para mantener una bioluminiscencia permanente.
A diferencia de la fluorescencia que requiere bombillas especiales, la bioluminiscencia de esta planta se produce sin ningún tipo de estímulo particular. La investigadora Karen Sarkisyan menciona que "si se trata muy bien la planta, si recibe suficiente luz solar y está sana, brillará más".
Los investigadores eligieron una planta ornamental ampliamente usada en los Estados Unidos que no se considera invasora, por lo cual las posibilidades de que los genes modificados se propaguen a las plantas nativas y alteren los ecosistemas son mínimas.
Aprovechando el potencial de investigación de la tecnología detrás de las petunias, se pueden desarrollar plantas que utilizan el sistema de luciferasa de los hongos para comunicarse cuando están estresadas o infectadas por un virus. En el futuro, los agricultores podrían recibir información temprana sobre los problemas con sus cultivos a través de satélites o drones que vuelen de noche.