Científicos australianos, transformaron agua salobre y agua de mar en agua potable, utilizando estructuras metalorgánicas (MOF) y luz solar.
El estudió empleó un marco metalorgánico (MOF) con poli (acrilato de espiropirano) (PSP) como adsorbente de iones regenerable por la luz solar para la desalinización de agua/damiasolar.com
Los investigadores de la investigación científica publicada en Nature Sustainability, no sólo pudieron filtrar partículas nocivas del agua y generar 139,5 litros de agua limpia por kilogramo de estructuras MOF por día, sino que también realizaron esta tarea de manera eficiente frente a las prácticas actuales de desalación.
Las estructuras metalorgánicas -MOF, son una clase de compuestos que consisten en iones metálicos que forman un material cristalino con la mayor superficie de cualquier material conocido. De hecho, los MOF que podrían caber en toda la superficie de un campo de fútbol se encuentran en una cucharadita.
La Organización Mundial de la Salud sugiere que el agua potable de buena calidad debe tener un total de sólidos disueltos (TDS) de menos de 600 partes por millón (ppm). El equipo de investigadores pudo lograr un TDS de menos de 500 ppm en solo 30 minutos y regenerar el MOF para su reutilización en cuatro minutos bajo la luz solar.
El autor principal, el profesor Huanting Wang del Departamento de Ingeniería Química de la Universidad de Monash en Melbourne, señaló que este trabajo, abrió una nueva dirección para el diseño de materiales sensibles a los estímulos para la desalinización y purificación del agua de una forma energéticamente eficiente y sostenible.
“La desalinización se ha utilizado para abordar la creciente escasez de agua a nivel mundial. Debido a la disponibilidad de agua salobre y agua de mar, y debido a que los procesos de desalinización son confiables, el agua tratada puede integrarse dentro de los sistemas acuáticos existentes con riesgos mínimos para la salud”, dijo el profesor Wang.
“Pero los procesos de desalinización térmica por evaporación consumen mucha energía y otras tecnologías, como la ósmosis inversa, tienen varios inconvenientes, incluido el alto consumo de energía y el uso de productos químicos en la limpieza y decloración de membranas”.
“La luz solar es la fuente de energía más abundante y renovable de la Tierra. Nuestro desarrollo de un nuevo proceso de desalinización basado en adsorbentes mediante el uso de la luz solar para la regeneración, proporciona una solución de desalinización que ahorra energía y es ambientalmente sostenible ".
Según un reporte de la ONU, más de 780 millones de personas en todo el mundo carecen incluso de un servicio básico de agua potable y para 2025, la mitad de la población mundial vivirá en zonas con escasez de agua. La población global, llegará a los 10 mil millones para 2050 y la asombrosa cifra de 10,9 mil millones para 2100.