La iniciativa es de la Universidad del Valle con sede en Palmira donde enseñan a preparar y consumir los insectos.

Foto: Universidad del Valle sede Palmira

Un informe de la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura) expone que en el mundo el hambre va en aumento, se considera que 820 millones de personas sufren de este flagelo.

Para América Latina y el Caribe, la cifra asciende a 42,5 millones de personas; nuestro país no es ajeno a esta problemática, 2,4 millones de personas sufren de hambre y la cifra crecerá exponencialmente por la migración de venezolanos.

La Universidad del Valle con sede en Palmira está generando unos espacios para realizar capacitaciones a jóvenes de diferentes colegios donde se crea conciencia de la necesidad de acudir a alternativas naturales para contrarrestar esta problemática de la hambruna, y la solución, harina de grillo.

Los grillos usados para estas recetas son criados con cuidados especiales en recintos totalmente adecuados, luego pasan por un proceso de “choque de temperatura”, el proceso continúa metiéndolos en un horno para que se sequen, luego son llevados a una licuadora para crear la harina, se ciernen para apartar las partes solidas que llegasen a quedar y por último, se empaca el producto para la venta.

Este alimento, según los investigadores que realizan el proceso, son muchos más ricos en proteínas y lípidos que el ganado y de ellos se puede obtener omega 3, 6 y 9 que no tienen las carnes rojas o el pollo, así como los aminoácidos esenciales que hay en el pescado, por eso son tan nutritivos.

Estos espacios se están trabajando mancomunadamente con el Sena sede Palmira, el Club de la Ciencia de Colombia y varios colegios de la región. 

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