Investigadores colombianos hallaron el primer registro de tormenta solar ocurrida en el país. El fenómeno denominado Evento Carrington se presentó el 1º de septiembre de 1859 en la Catedral de San Jerónimo de Montería, en Córdoba. 

Según expertos, los documentos de la época revelan que la actividad auroral fue cerca al Ecuador, por eso los recientes reportes apuntan hacia el norte de la Costa, incluso plantean que el Himno Nacional de Colombia contiene una clara referencia de dicha tormenta en una de sus estrofas: “/derrama las auroras de su invencible luz/”. Para ellos, su escritor y expresidente de Colombia, Rafael Núñez, observó el acontecimiento y en al menos tres de sus poemas utiliza la palabra “aurora”.

Los primeros registros indican que los investigadores Freddy Moreno, director del Centro de Estudios Astrofísicos del Gimnasio Campestre, y su estudiante Sergio Cristancho encontraron otros documentos del fenómeno en el norte de Panamá —de donde Núñez también fue gobernador—. Recorrieron el Caribe y hallaron el libro bautismal de la Catedral de Montería, el cual aún conserva una descripción del evento de 1859 e incluye algunas imágenes de las auroras pintadas a mano.

Imagen tomada de www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0273117715006109

Para el profesor Santiago Vargas, del Observatorio Astronómico del Universidad Nacional de Colombia y uno de los investigadores del estudio, todas las características fenomenológicas que tiene una aurora están descritas en ese texto, incluyendo la aurora negra, que en lugar de ser brillante se ve como un hueco en el firmamento y aún no se sabe con certeza cómo se genera.

Según expertos, una tormenta solar de este tipo hoy en día afectaría
los satélites que orbitan la Tierra. / Foto: Cortesía Agencia de Noticias UN

Este hallazgo representa el fenómeno de este tipo más alejado de las zonas polares, donde generalmente tienen lugar las auroras que se produjeron por la actividad solar de la época. Según Vargas, el eje geomagnético en 1859 estaba en el punto de más baja latitud, por esto la acción de la aurora llegó más abajo, lo que permitió observarla cerca al Ecuador. Él asegura que aunque la tormenta solar no tuvo consecuencias nefastas sobre el planeta porque aún no se había desarrollado una tecnología satelital, la red de telégrafos sí se vio afectada.

El Evento Carrington fue descubierto por primera vez por el astrónomo inglés Richard Carrington,
quien observó un enorme destello de luz sobre la superficie de nuestra estrella.