La nueva metodología tiene un grado de complejidad mayor para los usuarios. Según el Ministerio es necesario que las autoridades ambientales ajusten sus capacidades y procedimientos.
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El pasado mes de febrero Catorce6 dio a conocer el nuevo plazo que había establecido en su momento el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible para la entrega de estudios ambientales con la nueva metodología, el cual debía ser efectivo este 2 de agosto pero que en la última semana fué prorrogado. (Resolución del Minambiente cambia plazo para entrega de estudios ambientales)
Las complejidades de la nueva metodología, implican la generación y superposición de las áreas de influencia por componente (geológico, atmosférico, flora, fauna, cultural, arqueológico, económico, entre otros). Asimismo, se exige para la caracterización de la flora, realizar una curva de acumulación de especies. Esto conlleva al incremento del costo y el tiempo del proyecto para la realización de estudios ambientales.
La nueva Resolución 1107 del 1 de agosto de 2019 expedida por el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, extiende un año más el plazo para la presentación de Estudios Ambientales mediante el artículo 5 de la misma, el cual señala que “Los estudios ambientales elaborados de acuerdo con la metodología adoptada mediante la Resolución 1503 de 2010 y que no hayan sido presentados, no se regirán por el presente acto administrativo, siempre y cuando estos estudios se radiquen antes del dos (2) de agosto de 2020 y los estudios ambientales que se presenten conforme a lo establecido en la Metodología General para la Elaboración y Presentación de Estudios Ambientales adoptada mediante la Resolución 1402 del 25 de julio de 2018, serán recibidos por las autoridades ambientales competentes y continuarán con el trámite previsto en los artículos 2.2.2.3.6.1 y posteriores del Decreto 1076 de 2015, para la evaluación y otorgamiento o no de la licencia ambiental.”
Varios peticionarios, entre ellos Ecopetrol y Naturgas, habían manifestado su inconformidad por el plazo estipulado de entrada en vigencia, ya que consideraban que el tiempo no era suficiente para que proyectos, obras y/o actividades que venían avanzando y planeando en sus Estudios de Impacto Ambiental, a la luz de la metodología del año 2010, los pudieran radicar oportunamente.
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