Las nocivas prácticas para la pesca, contaminación por aguas residuales y el pez León serían las causas de la reducción en el número de peces en las aguas de la península.
Pescadores de la zona aseguran que en el último año pasaron de pescar en promedio 120 peces en cada salida a capturar apenas 30, la mayoría, de especies no comestibles y con poco valor comercial.
“La situación en estas aguas es problemática porque esta es nuestra principal fuente de alimento y esto ha representado que muchas de nuestras familias, especialmente los niños, tengan problemas”, expresó Adeliano Tejada, pescador indígena de la comunidad ‘Apalaanchi’.
Entre las presuntas causas de la reducción de peces está la contaminación, debido a que varios sistemas de aguas negras desembocan en la zona / Crédito: Diario El Pilón
Según los pescadores de la zona, la reducción es consecuencia de diversos factores, entre los que destacan la contaminación, debido a que en esa área desembocan varias tuberías de aguas negras. De igual forma culpan a pescadores de otras comunidades del uso de explosivos y de elementos metálicos que además de matar producen lesiones graves en los peces lo que hace imposible su venta e incluso aseguran que la presencia del pez león, uno de los principales depredadores, ha contribuido a este problema.
La situación fue confirmada por Egidio Correa, quien forma parte del grupo de investigación de territorios semiáridos de la Universidad de La Guajira, grupo que adelanta una investigación basada en las denuncias de los pescadores de esa zona.
“Además de hacer trabajo de campo que ha consistido en acompañar a los pescadores en sus faenas, hemos instalado monitores sonares que detectan la presencia de peces y en efecto hemos notado que su cantidad ha disminuido considerablemente lo que además de ser un problema para estas comunidades es un claro riesgo para el ecosistema. Incluso, en horas de la noche cuando la actividad de algunas especies aumentan se ha visto una reducción importante” acotó Correra.
El experto añadió que además de las razones expuestas por los pescadores, la cantidad de peces ha mermado porque muchas especies han huido a otras aguas tras percatarse de los peligros que se presentan en esta área. Además solicitó a las autoridades ejercer mayores controles para evitar el deterioro del medio ambiente y por ende la desaparición de algunas especies y garantizar la seguridad alimentaria de las comunidades indígenas asentadas en la costa.
“La situación en estas aguas es problemática porque esta es nuestra principal fuente de alimento y esto ha representado que muchas de nuestras familias, especialmente los niños, tengan problemas”, expresó Adeliano Tejada, pescador indígena de la comunidad ‘Apalaanchi’.
Entre las presuntas causas de la reducción de peces está la contaminación, debido a que varios sistemas de aguas negras desembocan en la zona / Crédito: Diario El Pilón
Según los pescadores de la zona, la reducción es consecuencia de diversos factores, entre los que destacan la contaminación, debido a que en esa área desembocan varias tuberías de aguas negras. De igual forma culpan a pescadores de otras comunidades del uso de explosivos y de elementos metálicos que además de matar producen lesiones graves en los peces lo que hace imposible su venta e incluso aseguran que la presencia del pez león, uno de los principales depredadores, ha contribuido a este problema.
La situación fue confirmada por Egidio Correa, quien forma parte del grupo de investigación de territorios semiáridos de la Universidad de La Guajira, grupo que adelanta una investigación basada en las denuncias de los pescadores de esa zona.
“Además de hacer trabajo de campo que ha consistido en acompañar a los pescadores en sus faenas, hemos instalado monitores sonares que detectan la presencia de peces y en efecto hemos notado que su cantidad ha disminuido considerablemente lo que además de ser un problema para estas comunidades es un claro riesgo para el ecosistema. Incluso, en horas de la noche cuando la actividad de algunas especies aumentan se ha visto una reducción importante” acotó Correra.
El experto añadió que además de las razones expuestas por los pescadores, la cantidad de peces ha mermado porque muchas especies han huido a otras aguas tras percatarse de los peligros que se presentan en esta área. Además solicitó a las autoridades ejercer mayores controles para evitar el deterioro del medio ambiente y por ende la desaparición de algunas especies y garantizar la seguridad alimentaria de las comunidades indígenas asentadas en la costa.