Viernes, 17 Enero 2025

Pocos extranjeros llegados a Colombia lograron ganar el alma de la totalidad de los colombianos como el Padre Javier de Nicoló. Su compromiso con la niñez desamparada lo llevó a la creación de múltiples metodologías de inclusión que permitieron arrebatarle a la violencia cientos de niños y jóvenes.

No sólo los habitantes de la calle constituyen la población beneficiada de sus programas, cientos de niños de familias recicladoras encontraron en sus proyectos la herramienta para salir de sus condiciones de vulnerabilidad. “Cuando un niño deserta no entiende por qué. Lo que le ofrezco es un ambiente en el cual todos lo quieren, para que se sienta feliz y estudie con interés. En dos años lo sacas tú al otro lado”, se le oyó decir.

No en vano, la secretaria de Integración Social, María Consuelo Araújo Castro, resaltó con vehemencia el carácter de su obra social en beneficio de los niños, niñas y jóvenes más vulnerables del país, en especial los de Bogotá, pues en esta ciudad llevó a cabo gran parte de su labor.

0
0
0
s2smodern