Tras 14 intentos fallidos, Colombia está a punto de unirse a la creciente lista de países que prohíben la tauromaquia, con 93 votos a favor y 2 en contra.

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La Cámara de Representantes aprobó definitivamente el proyecto de ley que no solo prohíbe las corridas de toros, sino también otros tipos de “entretenimiento cruel con animales”, como el rejoneo, las novilladas y las becerradas. El proyecto ahora debe ser conciliado entre el Senado y la Cámara de Representantes antes de ser sancionado por la presidencia para convertirse en ley.

Desde 2020, Bogotá y Medellín han prohibido las corridas de toros, mientras que en Cali y Manizales continúan permitidas debido a su importancia en las festividades locales. El proyecto otorga un plazo de tres años al gobierno para ofrecer alternativas económicas a quienes dependen de la tauromaquia. Además, estipula que las plazas de toros se transformen en espacios adecuados para eventos culturales y deportivos.

Teniendo en cuenta que más del 50% de las plazas de toros se encuentran en abandono según el ministerio del interior. El representante Alejandro García ha destacado que el proyecto incluye una “reconversión” para las personas que demuestren que su sustento depende de las corridas de toros. Esta transición económica los integrará en las nuevas actividades que se desarrollarán en los centros culturales que se crearán en las antiguas plazas de toros.

“Al país le decimos que se prioriza el bienestar animal y al mundo que Colombia está en un proceso de transformación cultural con dignidad por todos los seres vivos”, mencionó el representante García.